¿Alguna vez has oído hablar sobre Macas? Si no es así, no te preocupes. Esta pequeña ciudad en el corazón de la Amazonía ecuatoriana, más conocida como Nuestra Señora del Rosario de Macas, ha pasado desapercibida durante mucho tiempo, pero eso está a punto de cambiar.
El objetivo que perseguimos con este proyecto de rescate cultural ha sido el de investigar mediante varios medios tanto tecnológicos como académicos, mostrando al mundo lo que esta ciudad tiene para ofrecer, porque de estos resultados pudimos concluir que es un lugar único; imagina una ciudad rodeada de selva tropical, donde la naturaleza y la cultura se mezclan de formas sorprendentes.
Hay cascadas escondidas, ríos cristalinos y una biodiversidad que te dejará sin aliento. El clima cálido-húmedo ofrece condiciones ideales para aquellos que disfrutan de un clima cálido durante todo el año. Esto puede ser especialmente atractivo para personas que prefieren evitar climas extremadamente fríos. Pero lo que hace a Macas realmente especial es su gente.
Encontramos por una publicación de la página oficial de Macas pudimos saber que es uno de los 12 cantones de la provincia de Morona Santiago, tiene una población de 41.155 habitantes muchos de ellos indígenas, han vivido en armonía con la selva durante generaciones.
Tienen conocimientos ancestrales sobre plantas medicinales, técnicas de caza sostenible y formas de vivir que respetan el medio ambiente. Es fascinante ver cómo mantienen sus tradiciones en un mundo cada vez más moderno.
Buscamos desarrollar el turismo informándonos de toda la ciudad, pero no de cualquier manera. Buscamos un turismo sostenible que beneficie a la comunidad local y proteja el medio ambiente.
No se trata solo de atraer visitantes, sino de crear oportunidades para los habitantes de Macas, según en antecedentes investigativos de los estudiantes de la Escuela Superior Politécnica de Chimborazo, esta ciudad se compromete con la participación comunitaria en el desarrollo turístico, evidenciado a través de encuestas y entrevistas, junto con el entusiasmo de los locales por compartir su patrimonio cultural, resalta la disposición de la comunidad para aprovechar el turismo como una plataforma para el crecimiento sostenible y la conexión global.
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Hemos identificado varios lugares increíbles que podrían convertirse en atracciones turísticas. Hay cuevas misteriosas, miradores con vistas impresionantes de la selva y sitios sagrados para las comunidades indígenas, también están explorando la posibilidad de crear rutas de senderismo y actividades de turismo de aventura, pero lo que queremos no se trata solo de lugares bonitos, queremos que el turismo pueda ayudar a resolver problemas reales, por ejemplo, están buscando formas de crear empleos para los jóvenes locales, para que no tengan que mudarse a las grandes ciudades en busca de oportunidades.
Estamos trabajando en ideas para proteger el medio ambiente. Una de las propuestas es crear un programa de educación ambiental para turistas y locales. La idea es que todos entiendan la importancia de cuidar la selva amazónica, la investigación tiene en cuenta la realidad nacional de Ecuador. El país tiene una economía que depende mucho del petróleo, y busca diversificar aun más sus fuentes de ingresos. Y con el turismo sostenible, pues esta ciudad podría ser una alternativa importante.
Desde el punto de vista cultural, buscamos valorar y preservar las tradiciones indígenas de la región, estamos informándonos sobre las vivencias de los adultos mayores de la comunidad para documentar historias, leyendas y conocimientos tradicionales.
La idea es que estos saberes no se pierdan y puedan ser compartidos con los visitantes en cuanto a la ecología, el proyecto pone un gran énfasis en la conservación. Está situada en una de las zonas más biodiversas del planeta, y es crucial proteger este ecosistema único. Investigamos formas de hacer que el turismo tenga un impacto mínimo en el medio ambiente.
Una parte importante es la documentación visual, estamos recopilando fotos y videos que representen la ciudad y sus alrededores; necesitamos la autorización de la comunidad local para hacer visitas en situ es importante respetar la privacidad y los deseos de las personas que viven allí. Tenemos que analizar todos los datos que hemos recolectado y a partir de ahí desarrollar un plan detallado para el turismo sostenible en Macas y presentar sus hallazgos a las autoridades locales, con esto logramos demostrar que se pueden combinar la investigación académica, el desarrollo comunitario y la conservación ambiental.
Avanzamos a través de las investigaciones y conocimientos que recopilamos en la clase de Realidad Nacional, Cultural y Ecológica, donde cada sesión nos proporciona aprendizajes fundamentales. Este conocimiento no solo nos permite contribuir con información, sino también con algo más significativo.
El proyecto de Macas nos recuerda que hay muchos tesoros escondidos en nuestro país, esperando ser descubiertos y apreciados. También nos muestra que es posible desarrollar el turismo de una manera que beneficie a todos: a los visitantes, a las comunidades locales y al medio ambiente, quién sabe, tal vez en unos años, se convierta en un destino turístico de fama mundial.
Pero incluso si eso no sucede, el proyecto ya habrá logrado algo importante: mostrar a la gente el valor de su tierra, su cultura y su forma de vida. Así que la próxima vez que pienses visitar la Amazonía, considera esta ciudad. Podrías ser parte de algo especial: el nacimiento de un nuevo tipo de turismo, uno que respeta la naturaleza, valora la cultura local y crea oportunidades equitativas para todos los involucrados.
Escrito por Emilio Roberto Aguilera Vera, Dylan Alexander Muñoz Toro, Jonathan Fernando Naranjo Mayancela, Josue Darío Palacios Parra, estudiantes de Ingeniería en Tecnología de la Información e Industrial, Universidad Indoamérica.
