La simulación como técnica de enseñanza en la carrera de odontología

Al estudiar una carrera del área de la salud lo primero que se debe tomar en cuenta es que la vida de una persona está en las manos del profesional. En el área odontológica, tras semestres de preparación lo que más ilusión te hace es tratar casos clínicos de la cavidad oral. A partir de este planteamiento surge la duda de cómo aplicar todos los conocimientos teóricos en situaciones de la vida real, sin cometer errores, pues la prioridad del profesional es el bienestar de su paciente.

El conocimiento teórico es indispensable para formar buenos profesionales, pero es igual de importante forjar la experiencia práctica. Y te preguntarás ¿cómo lograr esto sin alterar la seguridad del individuo? A través del Blog conocerás una técnica de enseñanza innovadora que permite a los estudiantes afinar sus habilidades profesionales en ambientes controlados.

Imagina lograr aprender y realizar inicialmente todos los procedimientos odontológicos aplicando técnicas e instrumentos especializados, sin correr riesgo de afectar a una persona.

Pues todo esto es posible gracias a la simulación como técnica de enseñanza. Este método consiste en recrear escenarios donde se propone casos clínicos de la vida real, lo que permite poner en alerta a los estudiantes explotando su conocimiento al aplicarlo en un entorno controlado.

Según el Dr. Juan José Christiani de la UNNE, el uso de simuladores representa un grandioso instrumento que facilita a los estudiantes adquirir habilidades y destrezas indispensables para cumplir su acción profesional. Es así que los simuladores permiten generar situaciones con casos diversos donde el alumno en formación enfrente la situación, demostrando que es capaz de diagnosticar y tratar las distintas afecciones.

Además, este método concede la oportunidad de cometer cualquier error, pues de este detalle surge la experiencia y poco a poco se adquiere mayor habilidad, de este modo mejorando la calidad de atención en pacientes. Debido a que los estudiantes han adquirido conocimiento completo, evitando vulnerar la salud del paciente.

Es importante tomar en cuenta que existen distintos tipos de simuladores, según Lina Health se clasifican en modelos de baja, media y alta fidelidad. El primero presenta de forma muy básica las características del paciente. Los simuladores de mediana fidelidad poseen partes con movimiento, texturas y caracteres que se asemejan parcialmente a los seres humanos.

Por otro lado, los simuladores de alta fidelidad son análogos a un individuo e incluyen un software complejo. Estos deben ser empleados acorde a la necesidad que surja del estudiante en su aprendizaje.

Es sabido que el área odontológica requiere más que el enfoque directo de la cavidad oral, pues el estudio conlleva el entendimiento de todo el cuerpo humano. Para comprender como ocurren los procesos fisiológicos, a lo largo del tiempo distintos establecimientos han utilizado técnicas como el estudio de piezas reales. Sin embargo, esto ha causado perturbación en varios casos.

Por lo que a partir de esta necesidad surge la simulación lo que permite a los estudiantes adquirir características para desempeñar las habilidades de forma óptima, además de adaptarse con facilidad a la transición de educación universitaria a la aplicación de clínicas para pacientes.

Los simuladores en odontología están diseñados con el fin de replicar los tejidos orales, proporcionando un escenario similar a una cavidad bucodental real. Estos modelos presentan movilidad mandibular, tejidos orales duros y blandos, dientes, textura y características que son fieles a la boca.

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Además, según la necesidad estos se ajustan para prácticas, desde lo más básico como rehabilitación oral o técnicas anestésicas hasta procedimientos más complejos como cirugía.

Cada simulador posee características según su requerimiento, pues se constituye de una serie de mecanismos que favorece el aprendizaje de las técnicas adecuadas, debido a que en ciertos modelos se presenta un sistema de advertencia que da aviso cuando el estudiante comete un error, permitiéndole mejorar en su habilidad y evitando exponer estas falencias a un paciente real.

La implementación de la enseñanza con simuladores reduce grandemente el riesgo de un estudiante en caer en algún tipo de procedimiento judicial, por cometer alguna falla accidental con un paciente real. Pues al adquirir experiencia, en el ámbito profesional se aplicará únicamente las técnicas perfeccionadas tras varias prácticas de simulación, sin poner la vida de una persona en riesgo por el hecho de aprender en base de un diagnóstico y tratamiento inexperto.

Algo importante que se debe comprender es que el uso de simuladores no tiene como objetivo reemplazar la práctica que se realiza a un paciente real, así lo reconoce la Dra.Kelly Grandez, cirujano dentista de la UNMSM.

Lo que busca esta técnica es preparar a los futuros profesionales para atender todo tipo de situaciones y observar su desenvolvimiento en los casos. Favoreciendo a que el alumno cometa todos los errores posibles en un simulador que no siente, pero si reacciona a los estímulos generando un escenario realista, de este modo afinando su atención hacia el paciente. Generando en el estudiante memoria sensorial para sus futuras consultas.

Los simuladores en odontología traen grandes beneficios para estudiantes y docentes de la carrera. Pues es cien veces mejor desarrollar y aplicar la teoría que simplemente quedarte con lo textual. Al existir distintos tipos de simuladores permite a los alumnos tener un aprendizaje progresivo, debido a que van adoptando técnicas básicas hasta alcanzar la resolución de casos clínicos complejos.

En odontología los simuladores además de mejorar las habilidades prácticas en atención clínica. También permite conocer que actitudes tomar con un individuo dependiendo de la edad o situación. Favoreciendo a la buena relación entre odontólogo y paciente, de este modo mejorando su experiencia evitando generar traumas en las personas atendidas.

Ahora ya conoces los grandes beneficios de aprender con simuladores, sin duda es impresionante lograr entender todas las técnicas de una forma recreativa y segura.

Coméntanos tu opinión: ¿piensas que los simuladores en odontología benefician a la mejoría de habilidades profesionales?

 

Escrito por Daniel Herrera Albán, Docente/Coordinador de Laboratorios y Clínica de Simulación; y Dina Carolina Rendón Pico, estudiante de Odontología, Universidad Indoamérica.

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