¿Alguna vez has pensado cómo se configuran la masculinidad en el sistema de género dominante como el nuestro? Te presentamos un planteamiento que pretende determinar el posicionamiento del hombre dentro de una sociedad androcentrista. En esta oportunidad hablaremos de los hombres universitarios de Quito.
En el marco del I Congreso Internacional de Investigación Científica (CiiC) 2018, las docentes e investigadoras de la Universidad Indoamérica Irina Freire y Diana Montero, y el investigador, Andrés Subía Arellano, realizaron un diseño cuantitativo, no experimental, temporalidad transeccional y alcance descriptivo de su ponencia académica.
En la muestra participaron 380 hombres universitarios entre los 18 y 24 años de dos universidades privadas y una pública de Quito.
Pero primero,
¿Qué es la masculinidad?
Desde mediados del siglo XX se planteaba como el esfuerzo permanente del hombre por reforzar su virilidad, otorgándole conductas desvinculadas a las prácticas y roles de lo femenino.
Esta desvinculación implica la construcción social de un hombre con habilidades físicas e intelectuales estructuradas desde la aceptación simbólica de lo masculino como generador de superioridad, poder y dominio, es decir, un sistema de creencias patriarcales que se convirtió en la piedra angular de desarrollo de las sociedades.
Pero,
A partir de los años 70…
Aparecieron las primeras prácticas discursivas de oposición frente al discurso patriarcal.
La acción social y política de los movimientos feministas, entre otros activismos sociales pretendieron cuestionar y transformar los patrones establecidos por el pensamiento hegemónico de dominación de género.
Y a principios del siglo XXl…
Apareció el mensaje urgente de transformar los patrones de pensamiento que sustentan las estructuras ideológicas de dominación de género, otorgándole al hombre la responsabilidad de participar en la lucha por la equidad e igualdad a nivel sexual, reproductivo, social, cultural y económico.
Y segundo, tengamos en cuenta la resignificación del término masculinidad por masculinidades.
En la primera década del siglo XXl, las investigaciones a nivel local e internacional, hicieron hincapié en el redireccionamiento del objeto de estudio de la masculinidad.
Hasta la de década de los 90, la investigación se centró en el ser hombre desde su individualidad social y particularidad biológica, y en el siglo XXl se dirigió hacia la comprensión y el análisis de la posicionalidad que el hombre como sujeto social asume en relación a un sistema de género dominante.
¿Qué pasó en Ecuador?
Aproximadamente, desde el 2000, la universidad ecuatoriana introdujo en el escenario académico el debate de género: equidades, masculinidades, feminismos, violencia de género entre otros aspectos relacionados a las relaciones de poder entre lo masculino y lo femenino.
Así, surgieron nuevos posicionamientos sobre la masculinidad hegemónica desde lo teórico y lo práctico; nuevas experiencias adquiridas, heredadas y forjadas que construyen el “ser hombre” desde la pluralidad y la participación.
Algunos temas como la corresponsabilidad en las tareas del cuidado en los hogares promueven la igualdad y las transformaciones sociales.
Las nuevas masculinidades permiten a los hombres asumir tareas de cuidado de hijas e hijos, personas mayores o con discapacidad, derrumbando estereotipos de género que los alejaban de estas prácticas y los privaban de la ternura, el afecto y el cuidado, según indica ONU Mujeres.
El aporte de este trabajo investigativo consiste en un posicionamiento ambiguo frente a un sistema de género dominante.
Es decir que los participantes:
- Mantienen un sistema de creencias patriarcales, principalmente, en el indicador de la virilidad.
- Factores asociados al dominio de la sexualidad.
- Un posicionamiento negativo frente a otros elementos del pensamiento hegemónico de la masculinidad.
- La naturalización del poder económico e intelectual sobre lo femenino y la demostración de los sentimientos, la afectividad y la emocionalidad.
- Y respecto a la demostración de la masculinidad, los participantes evidencian un posicionamiento negativo con un importante nivel de indecisión.
¿Te animas a pensar cómo es que las nuevas masculinidades contribuyen a una sociedad más igualitaria desde los espacios educativos?, déjanos tu respuesta.
Fuentes consultadas:
“Masculinidad hegemónica en el hombre universitario de la ciudad de Quito”, recuperado en I Congreso Internacional de Investigación.pdf, con fecha 5 de julio de 2022.
“Masculinidades en Movimiento: Ecuador avanza hacia la igualdad y la corresponsabilidad”, recuperado en https://lac.unwomen.org/es/stories/noticia/2022/05/masculinidades-en-movimiento-ecuador-avanza-hacia-la-igualdad-y-la-corresponsabilidad, con fecha 5 de julio de 2022.
